sábado, 17 de septiembre de 2016

¿PECADO ORIGINAL? ¿EXISTE?

Empecemos por definirlo, el diccionario de la RAE dice: “según la doctrina cristiana, pecado en que es concebida la persona por descender de Adán y Eva”; y Google señala que: en algunas religiones cristianas, estado de culpa que, desde Adán y Eva, es inherente a la condición humana y del que el hombre es liberado mediante el sacramento del bautismo. Pues bien como es netamente cristiano nos vamos a nuestro diccionario particular y que pudiéramos decir como los Legionarios nuestro manual de la fe, que es el Catecismo de la Iglesia Católica, y nos refiere a numerales que nos dan bastante luz acerca del tema propuesto, en el 397, leemos que “el hombre, tentado por el diablo, dejó morir en su corazón la confianza hacia su creador (cf. Gn 3,1-11) y, abusando de su libertad, desobedeció al mandamiento de Dios. En esto consistió el primer pecado del hombre (cf. Rm 5,19). En adelante, todo pecado será una desobediencia a Dios y una falta de confianza en su bondad”. Luego en el 398: “En este pecado, el hombre se prefirió a sí mismo en lugar de Dios, y por ello despreció a Dios: hizo elección de sí mismo contra Dios, contra las exigencias de su estado de criatura y, por tanto, contra su propio bien... Por la seducción del diablo quiso "ser como Dios" (cf. Gn 3,5), pero "sin Dios, antes que Dios y no según Dios" (San Máximo el Confesor, Ambiguorum liber: PG 91, 1156C). 

399: “La Escritura muestra las consecuencias dramáticas de esta primera desobediencia. Adán y Eva pierden inmediatamente la gracia de la santidad original (cf. Rm 3,23). Tienen miedo del Dios (cf. Gn 3,9-10) de quien han concebido una falsa imagen, la de un Dios celoso de sus prerrogativas (cf. Gn 3,5)”;  en el 402: “Todos los hombres están implicados en el pecado de Adán. San Pablo lo afirma: "Por la desobediencia de un solo hombre, todos fueron constituidos pecadores" (Rm 5,19): "Como por un solo hombre entró el pecado en el mundo y por el pecado la muerte y así la muerte alcanzó a todos los hombres, por cuanto todos pecaron..." (Rm 5,12). A la universalidad del pecado y de la muerte, el apóstol opone la universalidad de la salvación en Cristo: "Como el delito de uno solo atrajo sobre todos los hombres la condenación, así también la obra de justicia de uno solo (la de Cristo) procura a todos una justificación que da la vida" (Rm 5,18)”. 

403: “Siguiendo a san Pablo, la Iglesia ha enseñado siempre que la inmensa miseria que oprime a los hombres y su inclinación al mal y a la muerte no son comprensibles sin su conexión con el pecado de Adán y con el hecho de que nos ha transmitido un pecado con que todos nacemos afectados y que es "muerte del alma" (Concilio de Trento: DS 1512). Por esta certeza de fe, la Iglesia concede el Bautismo para la remisión de los pecados incluso a los niños que no han cometido pecado personal (cf. ibíd., DS 1514)”. 

404: “¿Cómo el pecado de Adán vino a ser el pecado de todos sus descendientes? Todo el género humano es en Adán sicut unum corpus unius hominis ("Como el cuerpo único de un único hombre") (Santo Tomás de Aquino). Por esta "unidad del género humano", todos los hombres están implicados en el pecado de Adán, como todos están implicados en la justicia de Cristo. Sin embargo, la transmisión del pecado original es un misterio que no podemos comprender plenamente. Pero sabemos por la Revelación que Adán había recibido la santidad y la justicia originales no para él solo sino para toda la naturaleza humana: cediendo al tentador, Adán y Eva cometen un pecado personal, pero este pecado afecta a la naturaleza humana, que transmitirán en un estado caído (cf. Concilio de Trento: DS 1511-1512)…  Por eso, el pecado original es llamado "pecado" de manera análoga: es un pecado "contraído", "no cometido", un estado y no un acto”. Leamos bien es un estado no un acto.

En el 407 nos señala que: “Por el pecado de los primeros padres, el diablo adquirió un cierto dominio sobre el hombre, aunque éste permanezca libre... Ignorar que el hombre posee una naturaleza herida, inclinada al mal, da lugar a graves errores en el dominio de la educación, de la política, de la acción social (cf. CA 25) y de las costumbres. 

412: “Pero, ¿por qué Dios no impidió que el primer hombre pecara? San León Magno responde: "La gracia inefable de Cristo nos ha dado bienes mejores que los que nos quitó la envidia del demonio" Y santo Tomás de Aquino: «Nada se opone a que la naturaleza humana haya sido destinada a un fin más alto después de pecado. Dios, en efecto, permite que los males se hagan para sacar de ellos un mayor bien. De ahí las palabras de san Pablo: "Donde abundó el pecado, sobreabundó la gracia" (Rm 5,20). Y en la bendición del Cirio Pascual: "¡Oh feliz culpa que mereció tal y tan grande Redentor!"» (en el Pregón Pascual «Exultet» se recogen textos de santo Tomas de esta cita). 

Para entenderlo mejor, ejemplo, si una sábana posee una mancha en una esquina y por muy mínima que sea ¿dejas de reconocer que está manchada? U ¿Omites la mancha y dices que está perfecta? Ésta es la razón por la que nuestra Iglesia Católica aconseja bautizar a los niños para recuperar la gracia de Dios.  Dios nos bendiga.


miércoles, 6 de abril de 2016


SER O  NO SER RELIGIOSOS..?

animacion10.gifEn muchas ocasiones nuestros hermanos protestantes nos espetan  esta frase: “Yo no creo en religión, la religión no salva”.  Y en los diálogos que he realizado con ellos, percibo que muchos, desconocen lo que realmente significa el término, además de carecer de un sentido crítico con respecto a los temas que discuten o que proliferan.   Cabe destacar que  no poseen la noción de nuestra fe católica y lo que establece nuestra doctrina o el magisterio de nuestra Iglesia. En un buen diccionario se encuentra que Religión significa: creencia en Dios; un conjunto de creencias y prácticas acerca de lo considerado como divino o sagrado.  Esta palabra viene del latín, Religio,  viene del verbo religare, formado de re (de nuevo) y ligare  (ligar o amarrar). En resumen: es volver a unir los hombres a Dios. Nos dice el Padre Héctor Pernía en la V edición de su Guía bíblica que “quien diga que no cree y no necesita de religión alguna está confesando que se declara DESLIGADO DE DIOS. Así, sin darse cuenta, quien rechaza la religión se está confesando ateo. Son justamente los regímenes de tipo ateo los que en el mundo se han caracterizado por querer hacer desaparecer la religión del pueblo para que éste se olvide y deje de creer en Dios”.  Veamos ahora que nos dice la Biblia acerca del tema. Y en 2Tim 3,1-2, leemos: “Has de saber que en los últimos días vendrán momentos difíciles; los hombres serán egoístas, amantes del dinero, farsantes, orgullosos, chismosos, rebeldes con sus padres, ingratos, sin respeto a la religión”.  En 2Mac 15,17, nos dice que los israelitas, “...salieron a defender la ciudad, la religión y el templo”. Otra cita es Stgo 1,27: “La religión verdadera y perfecta ante Dios, nuestro Padre, consiste en esto: ayudar a los huérfanos y a las viudas en sus necesidades y no contaminarse con la corrupción de este mundo”. Son citas que dejan ver la existencia de la verdadera religión, de hecho, ellos mismos adoptan posturas o actitudes que son religiosas, sobre todo cuando van a practicar lo que para ellos es relacionarse con Dios: cierran sus ojos, se ponen de rodillas o doblan su cabeza; y hasta usan una Biblia. Y que nos dice la Palabra de Dios, acerca de ésto?  En las citas de Ex 25,22; 31,1-11; Nm 21,7-9; 2Sam 6, 2 y Dt 12,10-11: se evidencia que Dios establece formas rituales para hacerse presente, relacionarse, encontrarse y comunicarse con el pueblo. Por todo lo expuesto, hermanos, me confieso religiosa en búsqueda constante de relacionarme con mi Padre, mi Madre María y mi Hermano Jesús. Dios nos bendiga.